PRECIO DEL GAS EN COLOMBIA PODRÍA AUMENTAR HASTA UN 91,5%.

Nacional

Un considerable incremento en las tarifas del servicio de gas en Colombia podría llegar   hasta un 91,5% para 2026, como consecuencia de un aumento de las importaciones de gas y la insuficiencia en la infraestructura para transportarlo. Así lo expone un informe elaborado por los investigadores de la Fundación para la Educación Superior y el Desarrollo (Fedesarrollo) Sergio Cabrales y Juan Benavides, que analizaron los impactos que tendría una reducción en la capacidad nacional de producción gasífera en los próximos años.

Según los expertos, en un escenario donde la mitad del suministro de gas en el país provenga del extranjero, el aumento en las tarifas alcanzaría un 45,8%. Esto como consecuencia del impedimento por parte del gobierno de explorar nuevos yacimientos en Colombia.

Sin embargo, si Colombia llegara a depender totalmente de las importaciones, las tarifas del servicio en ciudades claves como Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y Bucaramanga podrían dispararse hasta un 91,5%, señala el informe.

Según los investigadores, “Colombia no podrá recuperar su autosuficiencia en gas natural sin la suscripción de nuevos contratos de exploración, un aumento significativo en la perforación de pozos y condiciones atractivas que estimulen la inversión en el sector de hidrocarburos”.

De acuerdo a la investigación, la situación llevó a un éxodo de importantes multinacionales como ExxonMobil, Shell, Repsol y Chevron, una salida que, aseguran, fue exacerbada por la reforma tributaria de 2022 que aumentó la participación estatal en el government take (la cantidad total de ingresos que un gobierno recibe de un proyecto, generalmente en la industria minera o de recursos naturales) de 63% a 80%.

Los investigadores señalan que “la molécula de gas importada podría ser hasta tres veces más costosa que la nacional”, algo que impacta directamente en el costo total de prestación del servicio que pagan los usuarios.

El aumento en la tarifa depende de diversos factores: el costo del gas (G), el transporte (T) y la distribución (D). En Bogotá, por ejemplo, se estima que el precio de la molécula subiría de un promedio actual de USD10 a USD17,07 si el suministro pasara a depender por completo de las importaciones, lo que provocaría un incremento del 89,3% en la tarifa.

Finalmente, los investigadores alertaron sobre las implicaciones de una dependencia total del gas importado en las ciudades con infraestructura más precaria, como Bucaramanga.

Según el informe, la ciudad enfrentaría incrementos del 45,8% en caso de importar el 50% del gas y hasta del 91,5% en un escenario de dependencia total.

Los expertos concluyen que, sin cambios en la política energética y sin medidas que incentiven la inversión privada, Colombia corre el riesgo de perder completamente su autosuficiencia en gas natural y enfrentarse a un panorama de tarifas más altas para los usuarios residenciales y comerciales.